La historia se repite, pero no tiene por qué hacerlo. Fui inspirado a fundar mi emprendimiento, Varuna, cuando Austin Water lanzó su primera advertencia de contaminación del agua en 2018; algo extrañamente similar sucedió semanas antes cuando se desató una masiva tormenta invernal en Texas. Debido a que las empresas de servicios hídricos no tenían suficientes datos en tiempo real para medir la calidad del agua en los vecindarios individuales, optaron por el enfoque general de solicitar a los 950 000 residentes de la ciudad que hirvieran el agua para ingerir o cocinar. Después de seis días de reducir sustancialmente el consumo de agua y entregar más de 625 000 botellas plásticas de agua, me propuse encontrar una solución.
Ingeniero en sistemas de oficio y solucionador de problemas por naturaleza, miré alrededor en busca de objetos domésticos y recordé que los lavavajillas cambian de modo cuando el agua que contienen está lo suficientemente limpia como para que pase la luz. Readapté el sensor del lavavajillas para crear mi primer dispositivo de medición de la calidad del agua. Emocionado, llamé a mi amigo y antiguo compañero de trabajo en Chicago, Jamail Carter, para contarle mi idea. Coincidimos en que los problemas de calidad del agua, como la crisis en Flint, son síntomas de un problema mayor: las deficiencias operativas dentro de los servicios hídricos. Cuando los técnicos no tienen visibilidad en tiempo real de lo que sucede en los sistemas de distribución de agua, las empresas de servicios derrochan en un único sensor vinculado a una ubicación o dependen de costosas mediciones manuales que consumen mucho tiempo. Si tan solo tuvieran conocimiento y acceso a la información correcta, cada sistema hídrico de cada comunidad en los Estados Unidos podría ahorrar miles de dólares
—y vidas— anualmente por cada punto de recolección de muestras in situ.
Tras meses de realizar prototipos e investigaciones, Jamail y yo lanzamos Varuna. La plataforma brinda a los pueblos y las ciudades predicciones, recomendaciones y alertas basadas en la IA de Google para minimizar las deficiencias en las operaciones de gestión hídrica. Mediante una serie de sensores conectados, Varuna reduce la cantidad de veces que los técnicos necesitan recolectar muestras de agua para realizar pruebas de laboratorio para determinar problemas de calidad. La Google Maps Platform proporciona el “dónde” para el qué y el por qué de los problemas de contaminación de la calidad del agua, mientras que Google Cloud permite que los usuarios accedan a esta información cuando la necesitan.
La investigación muestra que los sistemas hídricos en las comunidades de color cuentan con una cantidad desproporcionada de infracciones de la EPA. Al eliminar las excusas y permitir el acceso, podemos tener un impacto positivo en las comunidades marginadas. Por eso primero experimentamos con programas en ubicaciones históricamente diversas, como Luisiana, Texas
y Alabama, y abordaremos Chicago, Nueva Jersey y la Ciudad de Nueva York a continuación.
Como inmigrante de color y fundador que desarrolló un emprendimiento en Texas, comprendo de primera mano la frustración de que se nos niegue el acceso a los recursos necesarios. Más allá de la humanidad inherente de la misión de Varuna y de nuestra trayectoria empresarial comprobada, Jamail y yo enfrentamos obstáculos sistemáticos cuando intentamos reunir el capital y relacionarnos en una industria predominantemente caucásica. Afortunadamente, se nos están abriendo puertas, de manera forzada en algunos casos, que antes no se abrían para equipos como el nuestro. La recepción de USD 100,000 por parte de Google for Startups Black Founders Fund el pasado octubre no fue solo una inversión financiera, sino un voto de confianza. Tan solo tres meses después de haber sido seleccionados para Black Founders Fund, recaudamos USD 1,6 millones adicionales, añadimos dos miembros y una agencia asociada de diseño al equipo, mientras rediseñamos y redujimos los costos de nuestro hardware a la mitad. Cuando se financia a los fundadores de color, no solo se estimula la generación de riqueza y se crea acceso igualitario a oportunidades económicas, sino que también se ayuda a devolver el favor dando cabida a otras comunidades poco representadas con nuestra tecnología; un vaso de agua no contaminada a la vez.
Varuna se basa en la creencia de que cuanto más se sabe, más se puede hacer. El primer paso para la creación de un cambio real es prestar atención a la gravedad del problema, ya sea mejorar la calidad del agua o crear condiciones de competencia equitativas para las empresas entre la población de color, porque solo así abordaremos colectivamente el problema. El acceso al agua potable es una necesidad humana fundamental y universalmente reconocida; algo que todos los seres vivientes compartimos. Con el respaldo de las personas y los productos de Google, en este Día Mundial del Agua pretendemos convertir ese derecho
en realidad y dar impulso a los futuros fundadores de color a lo largo del camino.